El ministro de Petróleo y presidente de Petróleo de Venezuela (PDVSA), Rafael Tellechea, inició una campaña para mostrar que avanza en la recuperación de la producción y en el cobro efecto de las exportaciones. Presentó el Plan de Recuperación Integral Productiva de PDVSA para este año bajo las siglas de PRIP-2023, el cual se plantea alcanzar una producción sobre 1,1 millones de barriles por día, elevar las exportaciones a 900.000 barriles diarios y acumular ingresos este año por 13.388 millones de dólares.
La flexibilización de la licencia que tiene Chevron de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC por sus siglas en inglés) del Departamento del Tesoro ha permitido alzas en el volumen de producción de las empresas mixtas en las que esta compañía participa y también ha favorecido el regreso de las exportaciones de crudo hacia Estados Unidos, pero existen dudas sobre el esfuerzo propio que pueda hacer PDVSA, aunque todo apunta al mejorador de crudo de Petro Cedeño.
El problema para Tellechea se presenta en la refinación y la distribución de combustibles. Si bien el suministro de condensados por parte de Irán para el proceso de refinación se mantiene, pero es de manera inestable y no permite elevar la capacidad de producción de refinados. A lo anterior se agregan los cortes eléctricos, que han complicado los procesos, y las fallas en las unidades de transporte o gandolas, aunque se han incorporado nuevos vehículos.
La cifra que se maneja sobre la demanda de combustibles está cercana a los 250.000 barriles diarios con tendencia a aumentar, pero la capacidad de refinación está limitada y la oferta se mantiene sin poder alcanzar de manera permanente más de 200.000 barriles por día, lo que implica un déficit.
La salida que ha encontrado PDVSA ha sido restringir los suministros en el interior del país, reducir con tendencia eliminar la venta subsidiada y darles prioridad a los despachos hacia la ciudad de Caracas. Hay limitaciones en el expendio de diésel a transportistas, industriales y productores agrícolas.
Al respecto, el PRIP-2023 prevé que las refinerías alcancen un volumen de procesamiento de crudos por el orden de 345.000 barriles diarios, un nivel de producción de combustibles sobre los 254.000 barriles por día y que ese volumen intente cubrir al menos 221.000 barriles diarios del mercado nacional, pero en la misma empresa hay duda de que se alcancen estos objetivos.
Una situación similar ocurre con el gas doméstico (propano) al punto que el presidente Nicolás Maduro emplazó a Tellechea y en general a PDVSA. “Les doy tres meses para abordar esta situación crítica de estos estados y dar una respuesta positiva al pueblo de Venezuela. Tres meses tienen: 90 días", dijo Maduro.
El monitoreo que realiza el Observatorio Venezolano de Servicios Públicos indica que al menos 40% de la población está insatisfecha con el servicio de gas doméstico.
PUBLICADO: 30 de mayo de 2023